martes, 19 de febrero de 2013

“El impacto de la Encíclica Rerum Novarum en México”. Daniel Treviño Rodríguez




El 15 de mayo de 1891, el entonces Papa León Xlll, hizo pública una encíclica que para su entonces daría un giro de 360 grados en materia de derecho laboral, puesto que abordaría temas, que en su tiempo, no habían sido desafiados:  el uso del trabajo del hombre como mercancía; la utilización de niños como fuerza laboral; y la protección de la mujer trabajadora, entre otros temas revolucionarios e importantes para su época. 

Antecedentes globales
Primeramente, hay que destacar que Papa León Xlll nació en una familia pobre de padres trabajadores, lo que pudo haberlo impulsado a tener esas ideas, que para su tiempo ninguna figura religiosa pública había puesto en tela de juicio. Además, este Sumo Pontífice siempre se había destacado por intervenir en temas sociales, y existen antecedentes de que  llegó a tener fuertes roces con el rey Leopoldo I, y de que apoyaba abiertamente al partido liberal y rechazaba el capitalismo en gran medida.

En lo que respecta a lo que estaba sucediendo en el mundo por esas fechas, los siglos XVIII y XIX habían sido de grandes cambios en materia laboral,  se había suscitado la revolución industrial en Inglaterra, la cual trajo consigo ideas novedosas para ese entonces,  como promover las  “uniones de trabajadores” o lo que se conoce  actualmente como gremios, sindicatos o cooperativas. Asimismo, los trabajadores se dieron cuenta que juntos podían exigir mejores salarios y oportunidades, y empezaron a realizar huelgas, plantones y marchas para que sus peticiones fueran escuchadas.

Antecedentes en México
Ahora bien, en lo que respecta a México en cuestiones de derecho laboral en ese periodo especifico de tiempo, para 1891 ya se había gestado la Independencia del país, y se había arrebatado el poder que tenían los “conquistadores” sobre el pueblo mexicano, pero las cosas no eran tan prometedoras para la clase trabajadora.

Aún en esa época y aunque José María Morelos y Pavón en 1813 redactara el documento “Sentimientos de la nación”, donde trataba de darle al obrero una jornada de trabajo menos larga, un salario justo y una vida digna fuera del trabajo, todavía existía una desigualdad notoria entre patrones y trabajadores, puesto que nadie regulaba a ciencia cierta, que los dueños de las haciendas pagaran un sueldo justo a sus empleados, o les dieran los días de descanso correspondiente, y mucho menos que se vigilara que a los niños y a las mujeres trabajadoras se les tratara de una forma aceptable.

La Encíclica Rerum Novarum
Ahora sí, ya que abordamos y conocemos como era el contexto en materia del derecho laboral en el mundo y en México en los períodos señalados, podemos tener una mejor visión de lo que esta carta escrita por el Papa León Xlll significó en su época, y más viniendo de un personaje tan importante como lo es la cabeza de la Iglesia Católica, cuyas opiniones han marcado e influenciado históricamente en cierta forma el mundo.

Haciendo una pequeña sinopsis de esta encíclica, los puntos más relevantes que se presentan en ella son:

1. La fuerza de trabajo del hombre no debe ser considerada una mercancía u objeto en venta o renta.

2. El derecho de los trabajadores a asociarse.

3. Un día de descanso por semana (domingo).

4. La prohibición del trabajo infantil.

5. La aplicación de una protección especial a la mujer trabajadora.

6. Fijar un salario justo.

7. La condena de la lucha entre las clases sociales.

8. La identificación del capitalismo como causa de pobreza y degradación de los trabajadores.

Como se puede ver, esta carta les confiere a los trabajadores ciertos derechos que para su época eran revolucionarios, puesto que no fue hasta el 31 de enero de 1917, 26 años más tarde, que en México se estableció la primera Constitución que trató oficialmente el derecho laboral y se encargó de hacer que éste se cumpliera y se impusieran castigos a todos aquellos que lo transgredieran.

Ahora bien, en mi parecer, esta encíclica tal vez no hizo un gran revuelo entre la población del país, ya que especialmente México, considero yo, había atravesado un período bastante oscuro, donde la Iglesia había estado apoyando a los españoles que invadieron nuestro país, creando un cierto recelo en la población mexicana. Además, en la misma carta, el Santo Pontífice le confiere a los “patrones” la capacidad de decidir si deseaban o no seguir los mandatos mencionados, puesto que éstas eran sugerencias que él consideraba apropiadas, pero en ningún momento los obligaba a seguirlas.

Por otra parte, creo yo que esta encíclica no ha perdido vigencia actualmente, pues aún en nuestros días se pueden ver casos donde los empleadores abusan de su “poder” adquisitivo y ejecutivo, y aprovechan la ignorancia de la fuerza laboral para someterlos a jornadas de trabajo inhumanas, salarios muchas veces más abajo de lo que dicta la ley e incluso sin días de descanso.

Algo que también me llamó mucho la atención de esta encíclica, es que enuncia que se debe de prohibir la utilización de menores de edad como fuerza laboral y promueve una protección especial a las mujeres trabajadoras, algo que para mi gusto es bastante interesante y plausible, ya que hoy en nuestros días, cien años después, se sigue luchando para que se respeten sus derechos.

Bibliografía


Biografías y vidas. (s.f.). Recuperado el 11 de 02 de 2013, de http://www.biografiasyvidas.com/biografia/l/leon_xiii.htm
Lozas, M. (s.f.). Catholic.net. Recuperado el 11 de 02 de 2013, de http://es.catholic.net/comunicadorescatolicos/727/1057/articulo.php?id=16936
Machicado, J. (s.f.). Recuperado el 11 de 02 de 2013, de http://jorgemachicado.blogspot.mx/2010/03/rerum-novarum.html 
Sánchez, J. M. (s.f.). Fundación León Xlll. Recuperado el 11 de 02 de 2013, de http://www.fleonxiii.net/portal/index.php?option=com_content&view=article&id=47&Itemid=110
Vatican. (s.f.). Recuperado el 11 de 02 de 2013, de http://www.vatican.va/holy_father/leo_xiii/encyclicals/documents/hf_l-xiii_enc_15051891_rerum-novarum_sp.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario