06-Sep-2009
La inmaculada percepción
La inmaculada percepción
Vianey Esquinca
El Juanoma Humano
Una nueva enfermedad que amenaza con convertirse en una pandemia más peligrosa y letal que la influenza A HLNL descubierta por Elba Esther Gordillo, que ataca la corteza cerebral de los profesores mexicanos impidiéndoles aprobar el Examen Nacional para Maestros, se ha arraigado en el país.
Una nueva enfermedad que amenaza con convertirse en una pandemia más peligrosa y letal que la influenza A HLNL descubierta por Elba Esther Gordillo, que ataca la corteza cerebral de los profesores mexicanos impidiéndoles aprobar el Examen Nacional para Maestros, se ha arraigado en el país.
A este trastorno descubierto por Andrés Manuel López Obrador se le conoce como el Juanoma Humano, enfermedad cancerosa que se desarrolla en el sistema político mexicano cuando un individuo presta o vende su nombre para conseguir un beneficio inmediato, sin importar violentar las mínimas normas de respeto, decoro, dignidad o moral.
La enfermedad lleva el nombre del multifacético y multichambas Rafael Acosta alias Juanito, que adquirió fama cuando el investigador López Obrador realizó en Iztapalapa un experimento más arriesgado que la clonación de la oveja Dolly, transformando a un simple vendedor ambulante y agitador profesional en la figura del momento, que tenía como consigna dejar su lugar a la perredista Clara Brugada a cambio de tener trabajo y salario asegurados. Lamentablemente, como suele suceder en las primeras pruebas, algo salió mal y lo que parecía una exitosa operación de alquimia política, convirtió a Juanito en una especie de Frankenstein, pero con iniciativa.
Los primeros registros fueron consignados en la Biblia, donde se señala que Esaú vendió a su hermano Jacob su lugar de primogénito a cambio de un plato de lentejas. Ahora las lentejas han transmutado a curules o delegaciones políticas.
Todo indica que esta enfermedad es contagiosa y no es nueva, pero que ahora con los avances de la tecnología y la exposición pública los casos se descubren más rápidamente, incluso el Juanoma Humano puede ser una derivación o mutación de la enfermedad que les pega a los líderes sindicales que venden las plazas, o la gente que presta sus nombres al narcotráfico para poder realizar lavado de dinero o negocios sucios.
El Juanoma Humano ataca a las personas con debilidad de pensamiento y convicciones que los hace ser fácilmente manipulados, provoca una ausencia total de autocrítica, que les impide reconocer lo erróneo de sus actos, y puede provocar la locura. Quienes lo padecen llegan a presentar fiebres elevadas de casi 45° que los hacen alucinar y creen que ganaron una elección por méritos propios; en estados más críticos comienzan a pedir más derechos de los que originalmente se había pensado.
Puede presentarse sola o con padecimientos secundarios como son la Juanorragia, que es el brote excesivo del Juan que todos los políticos traen adentro y que los hace olvidar sus compromisos y acuerdos en pos de sus propios intereses; la Juanitis, que es la inflamación del ego juanesco de los funcionarios a los que les encanta el reflector y la atención pública, y la Juanaplegia, que es la parálisis de la conciencia y el razonamiento, que causa a una persona a actuar irracionalmente.
Lo que algunos expertos han calificado como un arma biológica sin control, pronto contagió a otros individuos y el 3 de septiembre se dieron a conocer nuevos e inquietantes casos en la Cámara de Diputados, lugar conocido por su ambiente propicio para el cultivo de virus y bacterias. El padecimiento atacó con más fuerza a la bancada del Partido Verde Ecologista, lo cual seguramente sucedió porque nunca se han vacunado contra el tráfico de influencias
Aunque la enfermedad le pega más a las mujeres, quienes fueron utilizadas para cumplir la cuota de género a la que están obligados todos los partidos, hubo hombres que presentaron el Juanoma Humano. El hecho que la enfermedad se presentara tanto en familiares y amigos, hace suponer a los expertos que hay una predisposición a transmitirse por contacto sexual, sanguíneo o político.
Este tipo de prebendas también indica que la enfermedad tiene orígenes anaeróbicos y fotofóbicos, pues generalmente se hace en lo oscurito, y se debe tener cuidado, pues cuando sale al descubierto antes de tiempo corre el riesgo de echarse a perder.
Ante el escándalo público de esta vergonzosa enfermedad, se espera que se pongan en cuarentena a estas diputadas y diputados. Si no se toman medidas y se previene esta tendencia, en cuestión de tiempo se convertirá en una enfermedad tipo diarrea verbal, tan común en los políticos.
animo a los juanoma del mundo!!!!
ResponderEliminarlo suyo seria sustituir el proyecto juanoma por el proyecto ceninoma
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