domingo, 8 de agosto de 2010

¿Qué es el Derecho Social?


Para tratar de definir el derecho social, debemos partir por entender al derecho en su más amplio significado, en términos generales, como el conjunto de normas que rigen la vida del hombre en sociedad, según lo manejan los más grandes tratadistas.

Cierto, dado que el derecho es una disciplina de opinión, podremos encontrar que habrá tantas definiciones como autores existan, desde los que intervinieron en la antigua Roma, hasta los que a lo largo de los siglos se han dedicado a pretender escudriñar dentro del concepto de ciencia y luego, ubicar al derecho.

Una vez que damos por cierta una definición de derecho, que en modo alguno pretende ser la única, podemos pasar a tratar de definir las ramas del derecho, entendiendo estas como las vertientes en que se ha venido dividiendo el derecho desde el principio de la humanidad.

Se han manejado, principalmente, dos grandes ramas: el Derecho Público y el Derecho Privado, siendo el primero aquél que existe cuando el Estado interviene en su carácter de autoridad, con facultades coercitivas y el segundo, cuando las relaciones jurídicas se dan entre particulares, es decir, entre pares.

De igual modo, se ha dividido en Derecho Penal y Derecho Civil. Del primero, podemos decir que ha incorporado disciplinas que en un momento le fueron ajenas, como la medicina legal, pues cada vez se han descubierto nuevas técnicas que sirven de auxiliares a la cuestión penal.

En cambio, del Derecho Civil se han ido escindiendo cada día, diversas ramas del derecho, como el mercantil, el derecho del trabajo, el derecho administrativo, en suma, todas y cada una de las disciplinas jurídicas que han adquirido la mayoría de edad y que se pueden considerar como ciencias autónomas, ajenas al derecho civil y su estrecho campo.

En cuanto al Derecho Social no podía ser la excepción, pues tiempo ha en que el derecho civil dejó de ser un saco lo suficientemente grande como para albergar los conflictos que en materia de trabajo, agraria y de seguridad social se han presentado, precisamente a raíz de los cambios en los estilos y formas de vida.

El derecho es cambiante, se va adecuando a los requerimientos de la sociedad, pues no podemos exigir a la sociedad que deba adecuarse a los cambios que el derecho propone.

Primero se dan las realidades y después, como consecuencia lógica, aparecen los cambios en el derecho.

Ahora bien, al derecho social habrá que definirlo como la rama del Derecho que se encarga de ordenar, sistematizar, tutelar, proteger y corregir todo tipo de desigualdades entre las clases sociales, es decir, busca la protección del campesino, del obrero y como fin último y por cierto, exquisito, proteger a todos los individuos contra los avatares de la vida, mediante los mecanismos que el propio Estado habrá de procurar.

Luego entonces, el Derecho Social comprende lo que conocemos como Derecho Laboral, Derecho Agrario y Derecho a la Seguridad Social.

Existe además, como cosa ajena, el derecho que controla el tránsito de personas de una región a otra, de un país a otro, que permite tanto la internación temporal como la definitiva.

Es el Derecho Migratorio. Adicional a lo anterior, ahora me permito someter a su consideración la posibilidad de que la actividad que realizan los migrantes, pudiera ser considerada como un derecho independiente, en cuanto siendo realidad que no disfrutan de la protección del derecho establecido, pudiera otorgárseles protección más allá de lo que legalmente existe.

Si vemos con detenimiento el flujo migratorio de México a Estados Unidos de Norteamérica, habremos de observar que la gente que busca otros horizontes, es aquella que tiene deseos de progresar, aquella que busca la forma de brindar los satisfactores que su familia necesita y que no encuentran un cauce legal para hacerlo aquí, en nuestro país.

Está documentado que poblaciones enteras se encuentran conformadas sólo por mujeres, niños y ancianos, pues los varones y algunas cuantas mujeres, en edad productiva, fuertes, sanos, emigran de manera ilegal, la mayoría, en busca del llamado “sueño americano”, que no es otra cosa que la posibilidad de enviar a su familia, el dinero necesario para subsistir.

Esos adultos jóvenes, esas mujeres fuertes, esa gente con ganas de progresar, le hacen mucha falta al país.

Por eso, ahora propongo ante Usted, que se incluyan como derechos fundamentales de nuestra gente, la posibilidad de optar por un mejor futuro, que puedan hacer dinero allá, pero que estén conscientes que su patria los requiere, que acá serán bienvenido, que aquí habrán de obtener las garantías individuales que actualmente les son negadas en ambas naciones.

Imagine Usted que pudiera garantizarse acceso a seguridad social, a créditos agrícolas, a un trabajo remunerador, a la totalidad de nuestros connacionales.

Del cómo lograrlo, ya lo hemos comentado Usted y yo y además, espero lo sigamos comentando en estas mismas páginas.

Por tanto, podríamos considerar como ramas configuradoras del Derecho Social, al Derecho Agrario, al Derecho Laboral, al Derecho de la Seguridad Social y al Derecho de los Migrantes.

En Usted está la última palabra.

Vale la pena.

Me gustaría conocer su opinión.

José Manuel Gómez Porchini

Comentarios: jmgomezporchini@gmail.com

Publicado en El Porvenir el 23 de enero de 2008.

1 comentario:

  1. Muy bueno su articulo, el problema migratorio se resolvera cuando en estados unidos, se empiece a considerar y respetar los derechos humanos.

    Para puntualizar sobre el derecho agrario, recomiendo visitar
    http://normasaaa.blogspot.com

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